3 ene 2008

Precisión


-Jacinto ¿qué hora tienes?
Jacinto hizo una mueca de contrariedad, con su mano derecha se arremangó ligeramente el brazo izquierdo hasta descubrir su reloj de pulsera. Entre los dedos índice y pulgar de la propia mano derecha abrazó el peluco, y lo miró fijamente sin cambiar el gesto de su cara. Volvió la mirada hacia José Gómez y soltó la siguiente parrafada:
-Hoy es miércoles, ¿verdad?. Todos los martes a las veintiuna horas cincuenta y ocho minutos, entro en la cocina de mi casa, que como sabes es también mi laboratorio fotográfico, me quito el reloj de pulsera y lo paro cuando el segundero marca las doce, y pongo las otras dos manillas marcando las diez en punto, dejo el reloj sobre los azulejos del fogón y enciendo la radio, emisora nacional, esperando las señales indicadoras de las veintidós horas, momento en el cual aprieto la corona del reloj para su puesta en marcha. La experiencia me dice que con esto aseguro llevar conmigo una hora casi exacta toda la semana. Ayer estaba en esta tesitura, pero la mala suerte, o quizás la ley de Murphy, me jugó una mala pasada, en el momento que estaba esperando las señales de la hora oficial, sonó el timbre de la puerta. La puerta de entrada está junto a la cocina, lo que hizo que en lugar de dejar que mi mujer abriera, lo hiciera yo instintivamente. Era una vecina que venía a contarle a mi mujer no sé que chorrada, el caso es que a mi me hizo polvo, hasta esta noche no podré tener en mi reloj la hora exacta. Por eso tengo que decirte que no puedo servirte con la debida exactitud. Ahora bien si solamente necesitas saber el momento actual con una precisión de mas menos treinta segundos, te diré que son las once y cuarto.

No hay comentarios: